Desde lo más profundo de mi corazón
saltando las barreras de la decencia,
como saltó el muro ese ladrón
que sin permiso te robo en mi presencia.
¿cómo pudiste vana expresión,
con ojos de gacela en celo, y presa,
quitarme los años de pasión
con los que te vestí de inocencia?.
¿Cómo cruel manto de dolor
que un día fuiste mi alma gemela,
pudiste desprenderte de mi amor
sin lágrimas, sin rimas, y sin treguas?.
La daga me atraviesa el corazón
sangrando las vivencias de tu cuerpo,
añorando el perfume de tu piel,
y el brillo de tus labios en mi cuello.
Rociándome el eterno amanecer
de caricias sin frenos y sin miedos,
gozando los momentos de placer
por encima de todo el universo.
Mi mente con tormenta está, y dolor
al ver el vacio en mi existencia,
donde antes sellamos un amor,...
ahora solo queda niebla.
Desde lo más profundo de mi corazón
saltando las barreras de la decencia,
hoy juro por tu amor y por mi honor
que enamorarme ahora........¡Dios no quiera!.
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